Incontinencia urinaria
Solución a la incontinencia urinaria de esfuerzo
Cuando pensamos en la incontinencia urinaria tendemos a imaginar mujeres de edad avanzada. Probablemente, la publicidad tenga mucho que ver en esto: los anuncios que presentan soluciones para las pérdidas de orina nos muestran mujeres maduras, con el pelo poblado de canas y que buscan disfrutar de su tiempo de jubilación lo mejor posible.
Pues bien, esta imagen es, en parte, errónea, o al menos muy limitada. Si bien es cierto que a partir de los 65 años la incontinencia afecta al 50% de las mujeres (ni más ni menos… ¡a la mitad de nosotras!), este problema, y en concreto la incontinencia de esfuerzo, puede aparecer mucho antes.
A partir de los 35 años, hasta un 35% de las mujeres puede empezar a sufrir pérdidas de orina… una cifra nada desdeñable en comparación con lo poco que se habla del tema.
Se pueden diferenciar dos grandes grupos de mujeres con incontinencia de esfuerzo en su juventud:
Tras tener un hijo
Aunque la buena noticia es que se puede prevenir y tratar, la incontinencia urinaria es una de las secuelas más molestas del parto. En más del 80% de los casos esta incontinencia de esfuerzo es leve o moderada y muchas veces se solventa por sí misma, pero siempre es conveniente acudir a un especialista, ya que una incontinencia mal tratada puede derivar en problemas crónicos en un futuro.
La principal causa de la incontinencia en las recién estrenadas madres es el parto vaginal, que provoca la congestión de la uretra y la distensión de los tejidos del suelo pélvico para que el bebé pueda salir por el canal del parto. Es normal, por tanto, que durante los primeros días tras el parto se produzca algún escape de orina, hasta que todos esos músculos y ligamentos (que sostienen el útero, vejiga y recto) vuelvan a tener su tono y fuerza habitual.
Pero si la incontinencia persiste más allá de las primeras semanas, hay un problema que se debe tratar. Afortunadamente, cada vez son más las mujeres que no lo asumen como una secuela inevitable y buscan soluciones.
Mujeres deportistas
Las mujeres que practican deporte, bien sean profesionales o amateurs, también son un grupo muy vulnerable a sufrir incontinencia.
Especialmente si se practican deportes de alta intensidad o de impacto, como puede ser el crossfit, tan de moda últimamente, o el simple levantamiento de pesas. Si no se prepara correctamente la musculatura, este tipo de ejercicios pueden provocar un daño progresivo en el suelo pélvico.
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Tanto en el caso de la reciente maternidad como en el de las deportistas, una de cada 3 mujeres jóvenes no acude al especialista al sospechar que sufre de incontinencia. ¿El motivo? Principalmente, la vergüenza, y en esto tiene mucho que ver lo que decíamos antes: las pérdidas de orina se asocian con mujeres mucho mayores. Este estigma hace que se convierta en un problema silencioso, pero es la pescadilla que se muerde la cola… sin ir al médico, no se solucionará.
¿Te identificas con lo que hemos contado en este post? ¿Crees que puedes tener incontinencia de esfuerzo, a pesar de ser aún joven?
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